La marca japonesa Maxell, recordada por su legendaria publicidad de los 80 y su vínculo con el audio analógico, vuelve a escena con una apuesta curiosa: un reproductor de casetes portátil, pero adaptado a los tiempos actuales.
Se trata del MXCP-P100, un dispositivo que respeta el formato clásico pero incorpora Bluetooth, USB-C, batería recargable y, por supuesto, la entrada tradicional para auriculares. El diseño es compacto y pensado tanto para quienes quieren revivir la experiencia retro como para los más jóvenes que descubren el formato por primera vez.

El regreso de los casetes no es un capricho: en los últimos años, las ventas de cintas se han multiplicado, impulsadas por coleccionistas, ediciones limitadas y una estética que volvió con fuerza. Maxell, que durante décadas fue un referente global del sonido físico, apuesta por recuperar esa experiencia con mejoras actuales, sin perder su esencia.
El MXCP-P100, por ahora, solo se vende en Japón por unos 13.000 yenes (aproximadamente 90 euros). Aún no hay fecha confirmada para su llegada a Europa, pero la noticia ya despertó interés en foros y redes, especialmente entre fanáticos del audio analógico.
El fenómeno no es aislado. Al igual que ocurrió con el vinilo, el casete ofrece una experiencia física y táctil que lo digital no reemplaza. Además, los dispositivos como este de Maxell permiten escuchar cintas antiguas, grabar mezclas y revivir el acto de “darle la vuelta” a la cinta, algo impensable en Spotify.
Con una estética nostálgica y funcionalidades modernas, este reproductor demuestra que lo retro puede convivir con lo actual si se le da el enfoque adecuado.