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Hay ciudades que parecen pensadas para ser fotografiadas. Praga es una de ellas. Sus castillos medievales, los puentes sobre el río Moldava y las calles que se iluminan con faroles antiguos crean una atmósfera única, como si el tiempo se hubiera detenido. En ese escenario, el OnePlus 15 fue el encargado de capturar lo que sucede cuando la tecnología se encuentra con una ciudad cargada de historia.
Durante el recorrido, la lluvia apareció sin aviso. Pero lejos de arruinar el plan, le dio un tono distinto a la ciudad: los adoquines mojados reflejaban las fachadas antiguas y cada esquina parecía una nueva escena. En esas condiciones, las lentes del OnePlus 15 mostraron un equilibrio muy natural entre luces y sombras, manteniendo los colores tal como se ven a simple vista.



El Detail Engine, el motor de imagen del dispositivo, fue clave. Procesa cada capa de color y textura para conservar la fidelidad del entorno, sin exagerar ni suavizar de más. En los detalles en primer plano, como una flor al borde del camino, la definición es tan precisa que parece tomada con una cámara profesional.
También hubo pruebas en la estatua de Kafka y en la Iglesia de Nuestra Señora de Týn, ya de noche, donde la cámara mantuvo la nitidez sin perder la atmósfera del lugar. El empedrado, cubierto por la lluvia, sumó un reflejo que potenció la profundidad de las imágenes.

